Ir al contenido principal

MOTIVACION LABORAL: PRODUCTIVIDAD Y RELAJACION



Cuando hay motivación y bienestar, hay productividad, ya que el individuo se siente con toda la energía capaz de producir, de lograr sus objetivos personales o de la propia empresa. Desea ser productivo para alcanzar la satisfacción personal y sí, por qué no, también los beneficios que podría obtener a nivel laboral, si es que la empresa motiva a sus empleados.

Es importante tener en cuenta que las compañías requieren un personal capaz de llevar a la empresa niveles superiores, y tener como meta el aumento de la productividad para generar mayor ganancia a la empresa, pero ¿Cómo se puede aumentar la productividad y la motivación?

Hay que ser muy claros en saber que vivimos en una sociedad consumista y exigente, en la que se nos impone que tenemos que generar en vez de ser productivos. Nos meten en la cabeza la falsa idea de que debemos vivir ocupados, trabajar mucho y generar demasiado, sino, no tenemos valor personal o nuestra labor es deficiente.



Veamos primero que es productividad:

Koontz y Weihrich (2004) citados por Fuentes (2012),  definen la Productividad como “la relación entre la cantidad de bienes y servicios producidos y la cantidad de recursos utilizados…. Además, es sinónimo de rendimiento, (Insumos) en un periodo de tiempo dado se obtiene el máximo de productos”.

Siendo así, muchas empresas toman y exigen a sus empleados laborar como esclavos, convirtiéndoles en maquinas, cuando ya de por si socialmente todos estamos mal condicionados a que para ser productivo hay que matarse trabajando, hay que exigirle al cuerpo mas de lo que puede dar. Aquí es donde entra la toma de consciencia y también el ciclo de la Gestalt o ciclo de la experiencia, mismo que va a iniciarse con una necesidad que surge y crea tensión (figura-fondo), lo que exige al individuo darse cuenta de la necesidad y no solo prestarle atención sino atenderla. En Gestalt el ciclo de la experiencia, busca satisfacer necesidades emocionales y biológicas, para que el cuerpo regrese a su estado normal. Es decir, recupere equilibrio. 




Pero que pasa cuando el ciclo nunca se completa? van quedando millones de Gestalt abiertas, osea necesidades no satisfechas que van generando: culpa, rabia, tensión, angustia, depresión, etc. Si bien, cuando el ser humano está en estado de alerta (ansioso, preocupado) va a estar hiperactivo, es decir que va a recibir mucho de afuera pero sin procesarlo, y claro que va a tener un rendimiento aparentemente bueno, porque está inyectado en adrenalina. Cuando los trabajadores se acostumbran a laborar bajo presión y con altos niveles adrenalina, después de un tiempo procede la crisis, lo que hoy conocemos como síndrome de burn out. 

De lo contrario, si un trabajador esta hipoactivo, es decir depresivo o distimico, sin motivación alguna en su trabajo, su rendimiento ha de ser bastante deficiente.
Ahora bien, descansar el fin de semana puede ser un medio reparador a medias tintas, pero si se hacen paradas o descansos todos los días durante el horario laboral, se va a generar un estado de relajación prolongada en la mente y el cuerpo, pues se está dando el permiso y oportunidad al organismo de encontrar la homeostasis y mantenerla, no de apagar el motor dos días (fin de semana) y arrancar en frío de nuevo, bombeándose como maquinas, cinco días a la semana y trabajando 8 o más horas sin descanso. 



Así que podemos decir que cuando el cuerpo recibe dosis de relajación acompañadas por estimulación sensorial, se van a activar zonas del cerebro fundamentales que van a provocar estar mayormente receptivos a los estímulos de afuera, mismos que al estar el cuerpo en equilibrio, puede procesar con facilidad.
Una mente libre de tensión, un cuerpo vigoroso y un espíritu lleno de satisfacción-plenitud, va a darles la motivación a los trabajadores para ser más productivos en su trabajo.

Bibliografia: 


Fuentes, S. (2012). Satisfacción laboral y su influencia en la productividad (estudio realizado en la delegación de recursos humanos del organismo judicial en la ciudad de Quetzaltenango.  

Copyright, todos los derechos reservados. © 2018 Mariela Saravia, Loto Azul.

Comentarios

Entradas populares de este blog

LA CONCIENCIA DE ¿QUIÉN ERES?

El titulo puede sonar como a una entrada para adolescentes en busca de su propia identidad, y es que como seres humanos dado el ambiente en que nos desarrollamos, no importa la edad que tengamos, nuestra identidad nunca queda fijada de manera completa. ¿Por qué? Porque la sociedad y la religión (que conste, no estoy hablando mal de ninguna, solo a nivel general) nos obligan a llenarnos de etiquetas para tener un lugar como personas en una sociedad prejuiciosa, de máscaras para ser aceptados o soportar ofensas, y las capas de la cebolla van incrementando, convirtiendo nuestra esencia y verdadero yo “self ” en una coraza fuertemente armada. Osho, que me encanta, lo expresa muy bien en sus libros cuando nos da a entender que somos libres desde que nacemos, pero la sociedad nos vuelve robots. Es decir, nos duerme, nos roba la conciencia. Esa libertad para elegir y ser nosotros mismos; porque ser así es mal visto. Socialmente es ser ‘rebelde’. Parece fácil responder a una pregunta tan

TE QUIERO O TE AMO

   Creo haber escrito ya sobre este tema o haber hablado en un taller, pero vale, hoy alguien me preguntó la diferencia entre amar y entre te quiero. Me dijo "Pero cual es el problema en separar el amor qué incluye sexo y el que no? La verdad no me parece que si le digo a alguien te quiero, le estoy diciendo que lo poseo" no quise entrar en discursos de polémica, pero sí le hablé con amor y consciencia.   "mira, el amor es uno sólo, pero la sociedad lo separa en amor de pareja, amor de padres a hijos, amor de amigos. Y ahí entra la diferencia social entre el te amo y el te quiero. Él te amo la sociedad lo marca sólo para la pareja, pero el te quiero que es posesivo lo fija para el resto de relaciones, lo que se vuelve una mutilación al arte mayor que es amar." Por supuesto esta persona comenzó a reírse y acabó dándose la vuelta para girarse y decirme "La verdad no creo nada de lo que dice. Me parece ilógico"   Y sí claro que a esta persona

RAÍCES DE LA DEPRESIÓN

Hace unos días vi la publicación de una frase referente a la depresión, la había escrito un autor que se denomina psicólogo....  Lo cuál sin afán de ofensas ni nada jactancioso, me despertó cierto enojo. Cómo publicar frases tan mediocres y además que incitan a quien la lee, a sentirse peor de cómo está, a no ver salida, o a encontrar la catarsis de una manera no sana. El punto es que en esas tres líneas publicadas en una red, generó una polémica bastante grande y me tomé la libertad de comenzar a despejar mitos, y provocar un darse cuenta en los participantes.  El autor de aquella frase decía  que aquellos que sufren de depresión no tenían valor de enfrentar la vida o le tenían miedo a esta. Claro, cada quien tiene su percepción de mundo, pero su manera de exponerlo con sarcasmo, me hizo pensar en la clase de profesional que es, lo cual me molestó mucho.   Y escribí varios comentarios en respuesta a los participantes para aclararles tremenda confusión, y a la vez me inquietó p